Real Orden de 29 de mayo de 1915 relativa a caducidad de Títulos y Grandezas de España

La Real Orden se creó para regular y clarificar las condiciones bajo las cuales los Títulos y Grandezas de España podían caducar, abordando la necesidad de mantener un registro actualizado y legítimo de la nobleza española. Su relevancia social radica en la gestión y el reconocimiento de los títulos nobiliarios dentro del marco legal del país.

  • Establece las causas de caducidad de los Títulos y Grandezas de España.
  • Define el procedimiento para declarar la caducidad de un título.
  • Regula la rehabilitación de títulos caducados bajo ciertas condiciones.
  • Determina la competencia del Ministerio de Gracia y Justicia en estos asuntos.

La Real Orden afecta principalmente a las personas que ostentan o aspiran a ostentar Títulos y Grandezas de España, ya que establece las reglas para su validez y continuidad. Para el ciudadano común, su impacto es indirecto, relacionado con el mantenimiento de un registro nobiliario claro y actualizado.

Antes de la Real Orden, existía una falta de claridad y regulación específica sobre las condiciones de caducidad de los títulos nobiliarios, lo que generaba incertidumbre y posibles disputas. Esta norma vino a llenar ese vacío legal.

No se identifican controversias significativas asociadas a esta Real Orden en la actualidad, aunque en su momento pudo haber debates sobre la legitimidad de ciertos títulos y la aplicación de las normas de caducidad.