Real Decreto de Regularización de Extranjeros 2000

El Real Decreto 239/2000 se creó para desarrollar el procedimiento de regularización de extranjeros previsto en la Ley Orgánica 4/2000. Su propósito era permitir que los extranjeros que cumplieran ciertos requisitos pudieran obtener un permiso de residencia legal en España, facilitando su integración social y laboral.

  • Establece los requisitos para la regularización de extranjeros.
  • Define el procedimiento para solicitar la regularización.
  • Determina la documentación necesaria para la solicitud.
  • Establece los criterios de valoración de las solicitudes.
  • Regula los efectos de la regularización concedida.

Este Real Decreto permitió a muchos extranjeros que residían en España de forma irregular obtener un permiso de residencia, lo que les facilitó el acceso al empleo, la sanidad y otros servicios públicos. También contribuyó a reducir la economía sumergida y a mejorar la integración social de los inmigrantes.

Antes de este Real Decreto, los extranjeros que se encontraban en situación irregular en España tenían dificultades para acceder al empleo y a los servicios públicos. Este decreto proporcionó un marco legal para regularizar su situación.

Algunos sectores criticaron el Real Decreto por considerar que era demasiado permisivo y que podía generar un efecto llamada. Otros, en cambio, defendieron la necesidad de regularizar a los inmigrantes para garantizar sus derechos y facilitar su integración.